El embovedado de la cantina ya está casi terminado, tan sólo faltan una bóveda de arista (para la cual tendré que fabricar más ladrillos), el barnizado y acabado de los muros y algunos complementos.
Sin embargo, antes de poder cerrar todo y empezar el trabajo en vertical, será necesario llevar la escalera, completa de muros y bóveda de cañón, hasta el nivel del piso superior.
En las siguientes imágenes se puede ver la primera fase de este trabajo.
A partir de ahora abandonaré el uso del cemento y los muros estarán realizados con piedras o ladrillos. La base de hormigón le otorga más estabilidad al edificio y seguiré incluyendo en los muros el esqueleto de alambre, pero de ahora en adelante las paredes serán alzadas siguiendo técnicas más conformes a las construcciones medievales (con las oportunas simplificaciones).
Respetando la misma pendiente (suicida) de la escalera ya terminada, voy a añadir cuatro nuevos escalones. Para alcanzar el nivel de la entrada aún faltará uno más, peró todavía no he decidido si va a ser de ladrillos o de piedra como buena parte del suelo de la planta baja.
Una vez definidas las medidas de los escalones y pegada la base, voy colocando los ladrillos y terminando la escalera según los mismos pasos ya definidos durante la construcción del primer tramo: puesta en obra de los ladrillos / primer pulido / limpieza del polvo / relleno de las juntas / segundo pulido / última limpieza.
Si antes tropezar por estos escalones podía llevar a fracturas más o menos graves, creo que ahora la caída podría tener muy facilmente un desenlace fatal...
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